Sopa de cebolla francesa...

La "soupe à l'ognion" es todo un clásico de la cocina francesa. Su profundo sabor viene dado por dos cosas, un buen caldo de carne y una cocción lenta de la cebolla, para que ella misma suelte sus propios azúcares y se vaya caramelizando poco a poco. Es por esto, por el tiempo que lleva la caramelización de la cebolla por la que os propongo esta vez preparar la receta para 6 personas en lugar de para 2 como suele ser habitual en el blog. Mi idea era tomar 2 raciones y congelar el resto, para así aprovechar mejor el tiempo. En lugar de eso, estaba tan buena que al día siguiente repetimos y al final tan solo congelé un taper con algo menos de dos raciones...

Ingredientes para 6 personas:

- 1 kg. de cebollas.
- 2 nueces de mantequilla.
- 2 cucharadas de aceite de oliva.
- 1 cucharada de harina.
- 1 vaso de vino blanco seco.
- 1 litro y medio de caldo de carne.
- 1/2 litro de agua.
- 1/2 cucharadita de hojas de tomillo.

Para servir:
- Rebanadas de pan recién tostado.
- Queso Comté.
- Cebollino picado.

Cortad las cebollas por la mitad transversalmente y picadlas en juliana. Echadlas en una olla de unos 4 litros de capacidad con el aceite y la mantequilla ya calientes y a fuego medio/alto (6 sobre 9 en mi cocina). Añadid una pizca de sal. No os preocupéis si parece demasiada cantidad de cebolla, ya que menguará mucho.

A partir de ahora, solo toca remover de vez en cuando la cebolla durante 45 minutos o una hora, hasta que adquiera un tono dorado que muestre que se han caramelizado correctamente.

En una cazuela aparte, poned a calentar el caldo de carne junto con el agua para que esté caliente en el momento de añadirlo a la olla.

Una vez esté en su punto, agregad el vino blanco a la olla y removed bien, raspando el fondo para despegar todo lo que haya quedado pegado en el, que dará un gran sabor caramelizado a esta sopa.

En cuanto el vino se haya reducido, echad una cucharada de harina, removed bien durante un minuto para que se cocine y no deje sabor a harina cruda. Agregad inmediatamente el tomillo, el caldo y el agua calientes, y dejad que cueza durante media hora.

A la hora de servir esta sopa, tened preparadas unas rebanadas de pan que cubran por completo el interior del cuenco en que vais a servirla. Tostad el pan en una sartén sin nada de grasa.

Llenad los cuencos con la sopa, echad encima el pan ya tostado y cubridlo generosamente con queso Comté rallado u otro que os guste y tengáis en casa. Metedlos un par de minutos bajo el gratinador del horno hasta que veáis que el queso ha tomado color y estará crujiente.

Sacad los platos entonces del horno, espolvoreadlos con cebollino picado y preparaos para disfrutar de esta deliciosa sopa francesa...